Cuando una pareja decide poner fin a su matrimonio, tienen hijos mayores de edad y sin bienes en común, el proceso de divorcio puede ser más simple y menos conflictivo. En Abogaclic, entendemos que la custodia y la pensión alimenticia son dos de los aspectos más delicados en un divorcio, y cuando estos no están en disputa, el proceso puede agilizarse.
El divorcio sin hijos menores suele ser menos complicado que aquellos que involucran a los más jóvenes, y puede llevarse a cabo de dos maneras principales.
Cuando ambas partes están de acuerdo en poner fin al matrimonio, es posible llevar a cabo un divorcio de mutuo acuerdo con un solo abogado que represente a ambos cónyuges, o cada uno puede optar por contratar su propio abogado. El proceso comienza con la presentación de una demanda de divorcio en el tribunal, la cual debe ser ratificada por ambas partes.
Cuando existe acuerdo entre los cónyuges y no hay hijos menores de edad, el divorcio puede llevarse a cabo de manera más fácil, económica y rápida a través de un notario.
Sin importar si hay hijos en común o no, si las partes no pueden ponerse de acuerdo en el divorcio, el proceso será necesariamente contencioso y requerirá la intervención de los tribunales.
¿Qué requisitos se deben cumplir para llevar a cabo un divorcio? En España, desde 2005, ya no es necesario alegar una causa específica para solicitar el divorcio. Sin embargo, es esencial que hayan transcurrido al menos tres meses desde la celebración del matrimonio y que se sigan ciertos pasos para obtener el divorcio.
Veamos algunas situaciones que pueden surgir:
Cuando no hay hijos en el matrimonio pero sí bienes en común, es necesario llegar a un acuerdo sobre la distribución de esos bienes. Esto puede implicar la asignación del uso de los bienes sin modificar la propiedad o la adjudicación de la propiedad a uno de los cónyuges a través de un convenio regulador.
La elección dependerá del régimen económico que regía en el matrimonio. Los dos regímenes más comunes son:
Divorcio sin Hijos y sin Bienes Compartidos Cuando no hay hijos en común ni bienes compartidos, el proceso se vuelve aún más sencillo. Esto suele ocurrir en casos de separación de bienes desde el inicio del matrimonio.
Este tipo de divorcio puede realizarse ya sea a través del tribunal o ante un notario. Para optar por el divorcio notarial, deben cumplirse los siguientes requisitos:
Deben haber transcurrido al menos tres meses desde la celebración del matrimonio. Ambos cónyuges deben estar de acuerdo en divorciarse. Ambos cónyuges deben comparecer personalmente ante el notario, sin posibilidad de representación por terceros.
El acuerdo de divorcio debe expresar claramente la voluntad de ambas partes y establecer las medidas que regularán los efectos del divorcio. No deben existir hijos menores no emancipados o con capacidad modificada judicialmente que dependan de los cónyuges. En caso de haber hijos mayores de edad o menores emancipados que dependan económicamente de los cónyuges, también deben participar en la firma del acuerdo, a menos que tengan ingresos propios y vivan fuera del hogar familiar. La asistencia de un abogado es obligatoria para asesorar a ambas partes y firmar la escritura de divorcio.
Cualquiera de los cónyuges puede solicitar una pensión compensatoria en caso de divorcio. Según el artículo 97 del Código Civil, esta pensión se concede cuando la separación o el divorcio generan un desequilibrio económico entre las partes, empeorando la situación de uno de los cónyuges con respecto a la que tenían durante el matrimonio.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que no se otorga automáticamente y debe evaluarse en función de varios factores, como la dedicación a la familia, la colaboración en las actividades del otro cónyuge y la situación económica previa al matrimonio.
En un divorcio sin hijos, ¿quién se queda con la vivienda familiar? En caso de que la pareja esté casada en régimen de gananciales y la vivienda sea su bien común principal, es necesario liquidar la sociedad de gananciales para determinar la titularidad de la vivienda.
La liquidación de la sociedad de gananciales implica realizar un inventario de activos y pasivos que deben valorarse y repartirse equitativamente entre ambos cónyuges. Si uno de los cónyuges recibe la propiedad total de la vivienda, debe compensar al otro cónyuge por su parte.
Si tienes alguna duda sobre cómo llevar a cabo un divorcio sin hijos o necesitas asesoramiento legal, no dudes en ponerte en contacto con nosotros en Abogaclic. Estamos aquí para ayudarte a navegar por este proceso de manera rápida y eficiente.
En España, es necesario haber estado casado al menos durante tres meses antes de poder presentar una solicitud de divorcio.
En un divorcio de mutuo acuerdo, ambas partes están de acuerdo en poner fin al matrimonio y acuerdan los términos del divorcio, mientras que en un divorcio contencioso, no hay acuerdo entre las partes y el juez debe tomar decisiones sobre cuestiones como la custodia de los hijos y la distribución de bienes.
No siempre es obligatorio, pero es altamente recomendable. Un abogado puede brindar asesoramiento legal y ayudar a negociar acuerdos, mientras que un procurador es necesario para representar a una de las partes en el juicio. Tener asesoramiento legal puede garantizar que el proceso se realice de manera justa y equitativa.
La duración de un divorcio puede variar, pero en general, un divorcio de mutuo acuerdo tiende a ser más rápido, a menudo resolviéndose en unos pocos meses. En cambio, un divorcio contencioso puede llevar más tiempo, a menudo varios meses o incluso más de un año, dependiendo de la complejidad del caso.
En un divorcio, la custodia de los hijos se decide en función de su interés superior. Puede acordarse una custodia compartida o que uno de los padres tenga la custodia principal. Además, se establecen acuerdos sobre visitas y pensiones alimenticias para los hijos, según las necesidades de estos y las circunstancias de los padres.
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Ricardo de la Peña
Nº de colegiado: 40424
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